La educación virtual ha llegado para quedarse. Instituciones educativas, empresas, organizaciones, profesores, estudiantes amplían o deciden incorporar formación virtual a su oferta educativa.
Estudiar dónde quieras y cuando quieras
El aprendizaje en línea permite acceder a los cursos en cualquier momento y en cualquier lugar, siempre que se cuente con un dispositivo con acceso a Internet. Esto permite conciliar la vida familiar con la vida laboral y evita los costos de traslado. Además, las instituciones pueden disminuir los costos de infraestructura necesarios para impartir clases presenciales.
Llegar a una mayor cantidad de alumnos
La educación a través de Internet permite acceder a nuevas regiones geográficas antes impensadas. Esto genera, por un lado, que los estudiantes puedan acceder a instituciones educativas distantes geográficamente y, por otro lado, que las instituciones educativas puedan brindar sus servicios a un mayor número de alumnos.
Ofrecer cursos específicos y actualizados a las demandas actuales
La educación online permite ofrecer programas de estudios actualizados y adaptados a las nuevas demandas del mercado. La educación virtual facilita la formación just in time que consiste en suministrar pequeñas píldoras de aprendizaje en el momento preciso que se necesita.
Personalización del aprendizaje
Las nuevas tecnologías favorecen un seguimiento personalizado del aprendizaje del alumno y la posibilidad de ofrecer caminos de aprendizaje individuales acordes con sus necesidades específicas. También permite que cada estudiante avance a su propio ritmo, sin sentirse presionado.
Ser protagonista de tu propio aprendizaje
En la educación virtual, el alumno se convierte en el verdadero protagonista de su aprendizaje. Se le exige mayor disciplina en los tiempos de estudio y una actitud proactiva en la búsqueda de conocimiento.